Vela de Masaje Appletini Cocktail 150 gr

Enciende la vela y deja que se derrita durante unos minutos para generar una pequeña cantidad de aceite líquido. Luego, apaga la llama con un soplo suave y vierte con cuidado el aceite templado sobre la piel, utilizando tus manos para dar un masaje sensual y envolvente. La cera derretida se transforma en un aceite de textura sedosa ideal para caricias prolongadas.

La vela está formulada para convertirse en un aceite de masaje seguro para el contacto dérmico. No obstante, como con cualquier producto nuevo, te recomendamos realizar una pequeña prueba de sensibilidad en una zona como el antebrazo antes de aplicarlo en áreas más extensas o sensibles, para asegurar que tu piel lo tolera perfectamente.

El aceite resultante se encuentra a una temperatura tibia y muy agradable, ya que la cera se funde de manera progresiva y controlada. Su calor es similar al de una caricia natural, lo que potencia la sensación de confort y relax durante el masaje, sin riesgo de causar molestias por exceso de temperatura.

Este producto está concebido específicamente como un aceite de masaje corporal externo. No está formulado para ser utilizado como lubricante íntimo interno, por lo que te sugerimos disfrutar de sus propiedades para masajes sensuales en la piel, evitando su aplicación en las mucosas.

Con un uso moderado y en sesiones de masaje, la vela de 150 gramos te ofrece una duración considerable para múltiples encuentros íntimos. El tiempo exacto de combustión puede variar, pero está diseñada para proporcionar numerosos momentos de placer antes de agotarse por completo.

Posee un aroma frutal a Appletini que es perceptible y evocador, pero elegante y no abrumador. Su fragancia se dispersa suavemente en el ambiente, contribuyendo a crear una atmósfera sensual y relajada sin resultar intrusiva, perfecta para sumergirse en una experiencia sensorial completa.

Absolutamente. Su uso es muy intuitivo y su efecto es suave y progresivo, lo que la convierte en una opción excelente para quienes desean explorar la sensualidad en pareja de forma segura y placentera. Es una manera elegante y poco intimidante de añadir una nueva dimensión a la intimidad.

Nunca dejes la vela encendida sin supervisión y asegúrate de colocarla sobre una superficie estable, plana y resistente al calor, lejos de materiales inflamables como cortinas o ropa de cama. Es fundamental apagar siempre la llama antes de verter el aceite sobre la piel para una experiencia completamente segura.

El aceite de masaje de la vela es compatible con la mayoría de lubricantes a base de agua, permitiéndote enriquecer la experiencia si lo deseas. Sin embargo, te aconsejamos evitar mezclarlo con lubricantes de silicona para prevenir posibles alteraciones en su textura sedosa y su fácil limpieza.

El aceite se limpia con facilidad de la piel y de la mayoría de superficies con un paño húmedo y un jabón suave. Para evitar manchas en la ropa de cama o textiles, te recomendamos utilizar una toalla o una sábana que no te importe manchar durante vuestra sesión de masaje íntimo.

No es necesario una espera prolongada. Basta con encenderla unos minutos hasta que observes que se ha formado una pequeña capa de aceite líquido en la superficie. En ese momento, ya puedes apagarla y disfrutar de su calor y textura inmediatamente sobre la piel.

La vela se consume casi en su totalidad a medida que la usas, transformándose en el aceite para masajes. Es normal que quede una pequeña base de cera sin fundir en el fondo del recipiente, lo cual es indicativo de que el producto ha llegado al final de su ciclo de uso.